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Las cifr
(*) Analista del Grupo Agenda Internacionalas mostraron crecimiento, también, en lo que refiere al gas.
Columnistas
Uruguay, firme: duplica su producción de pasta de celulosa
22:49 19/06/2014
GUSTAVO CHOPITEA (*)
Uno de los más grandes –y costosos– desaciertos de la política exterior argentina de la última década ha sido el mal trato constante a Uruguay. Abierto. Arrogante. Abusivo. Y equivocado. Ésta ha sido aparentemente la consecuencia de la puesta en marcha de la moderna (de última generación) planta de pasta de celulosa emplazada en Fray Bentos, hoy de propiedad de la empresa finlandesa UPM, antes de otra firma del mismo origen: Botnia.
Pese a las acusaciones de todo tipo que hemos lanzado sin descanso, la moderna fábrica de la empresa finlandesa parecería no contaminar. Prácticamente nada. Por esto los argentinos estamos ocultando la información ambiental que debería ser pública y que las autoridades orientales han subido en cambio, cándidamente, a la web.
La gente en Fray Bentos, por lo demás, no se murió. Ni se enfermó masivamente, como algunos anticipaban. Y, desde Uruguay, como se pretendía de inicio, hoy se exportan al mundo entero millones de dólares de pasta de celulosa fabricada con la madera local, la de la pampa húmeda oriental.
Pese a la realidad, muchos aún se resisten a dejar de lado la fantasía porque ello, naturalmente, sería reconocer su craso error admitiendo haberse equivocado, por años, por efecto de un obsesivo resentimiento, sin que el espacio en torno a Gualeguaychú se haya contaminado o venido abajo a no ser por otra cosa: el impacto de algunas de las obsoletas empresas industriales que trabajan en su propio parque industrial, el de Gualeguaychú, como algunos siempre nos recuerdan.
Mientras tanto, Uruguay ha seguido firme para adelante con el sector, encantado de su potencialidad exportadora y de su integración con uno de los planes forestales nacionales más exitosos de América Latina.
Hoy una segunda fábrica –también de última generación– está por empezar a operar a pleno en el país hermano. Es propiedad de otra empresa escandinava, en este caso sueco-finlandesa, con accionistas como Stora Enso y la chilena Arauco. De primer nivel.
En esa segunda fábrica se han invertido ya más de 2.000 millones de dólares para producir unas 1.300 toneladas anuales de pasta de celulosa. Esto es algo más de lo que ya se produce en la localidad de Fray Bentos. Cuando la Dirección Nacional de Medioambiente de la república vecina otorgue los permisos que aún están pendientes, habrá una segunda fábrica de pasta de celulosa frente a nuestras costas. Y una producción nacional que inexorablemente y frente a nuestros ojos sencillamente se habrá duplicado trabajando a pleno en Uruguay.
Para aquellos que miran a Uruguay con envidia, cabe apuntar que UPM ha anunciado que estudia la instalación de una segunda fábrica en la Banda Oriental, en Tacuarembó, Durazno o Cerro Largo. Más trabajo para los uruguayos y más divisas para su balanza comercial.
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