El consumidor chino arrasa con el asado uruguayo
La exportaciones récord obligan a Uruguay a abastecer el mercado interno con carne vacuna importada de menor calidad
Montevideo
Este año, Uruguay está batiendo su récord histórico de importación de carne de vaca para satisfacer al mercado interno, todo un cambio de coyuntura para uno de los principales productores mundiales, promovido por la subida constante de las exportaciones a un comprador voraz: China. Según datos oficiales, el pasado mes de julio llegaron al país sudamericano, una de las mecas mundiales del asado, 3.000 toneladas de carne bovina procedentes de Brasil, y en menor medida, de Paraguay y Argentina, Mientras, desde sus puertos salían miles de toneladas de producto local de alta calidad con destino a China y otros tantos países. La trazablilidad del ganado y la alimentación de las vacas, solo con pasturas, sin harinas de engorde u hormonas, ha permitido a la carne uruguaya posicionarse en el segmento de alta calidad en el mundo. En paralelo, la fiebre porcina ha disparado la demanda.
La situación es "inédita", según reconocen desde el Instituto Nacional de Carnes, en un país de poco más de tres millones de habitantes y 13 millones de vacas. Los precios están ahí para explicar el fenómeno: en Río Grande do Sul (Brasil) el kilo de novillo cotiza a 2,65 dólares (2,39 euros) -ayudado, en parte por la depreciación del real en los últimos años-, en Paraguay se paga a 2,60 dólares y en Uruguay ronda los cuatro dólares, según datos de Mercopress.
No hay comentarios:
Publicar un comentario