Matias Zorrilla tiene 30 años, es de San Juan y desde hace dos años está instalado en la capital de Dinamarca con el objetivo de juntar dinero y vivir una vida más cómoda. Desde que llegó tuvo que soportar duros trabajos y problemas de salud, pero asegura que para él todo vale la pena.

Llegó al viejo continente sin nada y fue gracias al apoyo de otros argentinos que logró establecerse. “Toda mi vida quise viajar, pero hasta ahora no había tenido la valentía de irme del lugar de confort. Cuesta una banda. En un momento lo decidí, me tomó como un año hacer la logística. Me vine sin nada, conocía a amigos de San Juan que estaban acá y ellos fueron mi nexo para empezar”, contó a Diario 13.

Es técnico en animación y diseño digital, trabajó como community manager y le encanta la fotografía, pero estaba dispuesto a trabajar de lo que encontrase. “El objetivo principal fue venir a conocer. Vivir tranquilo, relajarme y hacer un poco de plata. Pero con la idea de, en un par de años, ir a estudiar y vivir a Barcelona. Copenhague es un sueño, es una ciudad hermosa. Vivís en una burbuja, vivimos tan bien que nos olvidamos de los problemas que vivimos allá. Pero se hace muy difícil vivir en una sociedad tan diferente a la nuestra”.