AMÉRICA Se establece asimismo la 'ley seca' en los lugares públicos para los adultos
Toque de queda para los menores de 15 años en un pueblo de Argentina
El alcalde de Alba Posse prohíbe a los adolescentes estar en las calles a partir de las diez
El objetivo es prevenir 'la vagancia, drogadicción y alcoholismo'
Joan Manuel Serrat ya lo cantó en su célebre tema 'Poco antes de que den las diez', que pintaba el clima de época que vivían los amantes durante los años sesenta a finales del franquismo. "La niña duerme en casa y en el reloj darán las diez", entonaba el catalán.
Ahora en Argentina un alcalde de pueblo parece haberse inspirado en esa canción y prohíbe andar solos por las calles a los menores de 15 años a partir de las 22 horas. La insólita prohibición rige en Alba Posse, distante 1.100 kilómetros al noreste de Buenos Aires, en la provincia de Misiones.
Los policías municipales tienen la obligación de llevar al chico a la comisaría y avisar a los padres para que lo recojan. La ordenanza "se cumple sin excepciones", según el alcalde, Nelson Carvalho, quien argumentó que, así, trata de prevenir "la vagancia, drogadicción y alcoholismo".
"De los 12 a los 15 años los niños viven una situación crítica en la que son un poco rebeldes y propensos a tomar alcohol y otras sustancias prohibidas. De ahí que, con facilidad, los extraños pueden llevarlos a consumir esas sustancias", sostuvo el jefe comunal, que también es docente.
Carvalho recordó que, en Alba Posse, "hace unos años empezamos a sufrir situaciones de robos, accidentes de tráfico, drogadicción y alcoholismo, siempre por las noches y donde los más chicos estaban involucrados".
Según el alcalde, a partir de que empezó a regir la prohibición, los chicos "no beben ni se drogan y rinden mejor en la escuela". "Los padres lo agradecen, porque los chicos rebeldes han sido controlados", agregó.
Además, en Alba Posse todos los vecinos tienen prohibido beber alcohol en sitios abiertos, tales como calles, plazas y paseos. Las multas para los infractores ascienden a 5.000 pesos (455 euros al cambio oficial). "Los inspectores y la policía tienen obligación de derramar la bebida y detenerlos", dijo el alcalde.
"Los vecinos pueden salir a caminar tranquilos, ya que no van a encontrar borrachos ni gente molestando. Desde el Estado voy a hacer todo lo necesario para cuidar a los chicos y evitar que algo les pase. Soy el segundo padre de todos los niños de Alba Posse", prometió.
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